BIZCOCHO DE NATA Y LIMÓN CON COBERTURA DE QUESO DULCE

¡Hola amores! Hoy os traigo un bizcocho ligero con mucho sabor a limón que me encanta, soy una loca de los cítricos para la cocina en general, y para repostería, más. Está hecho con nata que le da mucha suavidad, por lo que es de los bizcochos que en mi casa dura un telediario. Además está cubierto con un queso dulce que lo hace más rico áun.

La nata es uno de los ingredientes que más me gusta usar en repostería. Se ha definido siempre como una leche rica en grasa con niveles bajos de proteínas y lactosa.  Durante mucho tiempo, la nata solo se utilizó para elaborar mantequilla, pero, a partir del siglo XVII, los cocineros y jefes de cocinas reales y nobles comenzaron a interesarse por ella. Empezó entonces a ser apreciada en la cocina, por su untuosidad y ligereza.


 Tradicionalmente se recogía la nata que, tras la cocción, se separaba de la leche, pero a finales del siglo XIX (1.879), Gustaf de Laval inventó la desnatadora centrífuga que permitió obtener grandes cantidades de nata. A lo largo del siglo XX, la nata se ha ido convirtiendo en el ingrediente básico de algunas cocinas regionales formando parte de muchos de sus platos emblemáticos. La nata simboliza lo mejor de la leche, la excelencia.

Y de esta manera, este bizcocho es excelente debido a sus ingrendientes. Os dejo la receta...

 

4 huevos

170 gr harina

30 gr maizena

200 gr azúcar

80 gr mantequilla pomada

1/2 sobre levadura

100 gr nata para montar

Ralladura y zumo de limón

Una pizca de sal

 

Para la cobertura

50 gr queso crema

1 yogurt griego

Azúcar glass al gusto

 

1. Separamos las claras de las yemas y las montamos con 100 gr azúcar hasta formar un merengue.

2. Montamos la nata.

3. Batimos las yemas con los otros 100 gr de azúcar, mantequilla, zumo y ralladura.

4. Integramos la nata montada.

5. Tamizamos la harina, maizena, levadura y sal. Añadimos.

6. Incorporamos las claras montadas, mezclamos con una espátula y volcamos en un molde. Horneamos a 180º durante 30 minutos. Sacamos, desmoldamos y dejamos enfriar.

7. Para la cobertura, batimos el queso con el yogurt y añadimos el azúcar glass al gusto. Cubrimos el bizcocho con esta mezcla y decoramos con rodajas de limón.

 

 



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